6 sencillos ejercicios para la memoria

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Toda persona ha tenido el ocasional "momento de la tercera edad".
Talvez le ha sucedido que fue a la cocina y no recuerda porque, o no puede recordar el nombre de un familiar durante una conversación. La falta de memoria puede ocurrir a cualquier edad, pero el envejecimiento por si sola no es generalmente una causa de deterioro cognitivo.

Cuando la perdida de memoria significativa se produce entre las personas mayores, generalmente no es debido a envejecimiento, sino a trastornos orgánicos, lesiones cerebrales o enfermedades neurológicas.

Los buenos hábitos de salud como: mantenerse físicamente activo, dormir lo suficiente, no fumar, tener buenas relaciones sociales, limitar el alcohol y una buena dieta, pueden ayudar a prevenir el deterioro cognitivo y reducir el riesgo de demencia.

Las condiciones de salud que pueden afectar las habilidades cognitivas son: la diabetes, hipertensión arterial, depresión, hipotiroidismo y niveles elevados de colesterol LDL (malo).

Los estudio han demostrado que hay estrategias que nos ayudan a proteger y mejorar nuestras mentes. Podemos intentar las siguientes:
  1. Seguir aprendiendo. Un mayor nivel de educación esta asociada con un mejor rendimiento mental durante la vejez. Desafié a su cerebro con juegos mentales, debido a que estos estimulan la comunicación entre las células cerebrales. Busque un nuevo hobby, y aprenda una nueva habilidad.
  2. Utiliza todos tus sentidos. Trata de poner a funcionar todos tus sentidos al momento de aprender algo nuevo, debido a que están involucrados en la retención de la memoria.
  3. Creer en si mismo. Si cree en los mitos del envejecimiento, incluso esto, puede contribuir al fallo de la memoria. Si usted cree que puede mejorar, tendrá una mayor oportunidad de mantener una mente ágil.
  4. Priorizar el uso del cerebro. Si no es necesario estar recordando en cada momento donde puso las llaves o cuando es el cumpleaños de su nieta, tendrá una mejor oportunidad para concentrarse y aprender otras cosas nuevas e importantes. Puede utilizar los calendarios o planificadores, listas de compras, carpetas y libretas de direcciones para mantener la información de rutina accesible. Designe un lugar en su casa para sus llaves, gafas y otros objetos de uso diario.
  5. Repita lo que quiere saber. Cuando quiere recordar algo que leyó o escucho, repítalo en voz alta o escríbalo. Si usted escucho el nombre de una persona, y quiere recordarlo, repítalo varias veces durante la conversación.
  6. Espaciar los momentos de estudio. Las repeticiones seguidas son potentes en periodos medidos de tiempo, como cuando estudia para un examen. Mejor en su lugar, vuelva a estudiar lo esencial después de periodos largos de tiempo. Particularmente, espaciar los periodos de estudio, es valioso cuando usted quiere manejar información compleja (como la medicina).